Del Alba al Crepúsculo

Se encuentra en una de las zonas de mayor dinamismo turístico de El Salvador. Además de su playa principal, conecta con el Estero de Jaltepeque, un importante humedal declarado sitio Ramsar por su valor ecológico. En este lugar se pueden realizar recorridos en lancha, observar aves y disfrutar de la pesca artesanal, ampliando las experiencias para los visitantes.

Además de sus atractivos naturales y recreativos, la Costa del Sol es escenario de eventos culturales y deportivos que promueven la identidad local y atraen visitantes durante diferentes épocas del año.

Entre ellos se incluyen torneos de surf, competencias de pesca y actividades comunitarias que refuerzan el sentido de pertenencia de la población.

Como parte de un proyecto de concientización sobre los paisajes de El Salvador, se destaca la belleza de la Costa del Sol y cómo la luz del sol transforma sus entornos. Durante las vacaciones, la zona es un destino popular, reconocida por sus playas, actividades deportivas, fauna, flora y competiciones de surf.

El desarrollo urbano ha diversificado la oferta turística, pero requiere conciencia ambiental y cultural, ya que la costa es un ecosistema valioso y reflejo de la identidad del país.

Es fundamental equilibrar progreso y conservación, garantizando que el turismo respete la biodiversidad y preserve la esencia del lugar, manteniéndolo como un espacio de disfrute recreativo y un legado natural y cultural de El Salvador.